¿Por qué deberías conocer la teoría de los cristales rotos?


Esta teoría, conocida también como la teoría de las ventanas rotas, describe como el descuido de los detalles termina deteriorando el entorno, en otras palabras, habla de cómo pequeños desperfectos en el ambiente generan más desperfectos y de mayor envergadura.


Esto ocurre porque se genera una percepción de permisividad y ausencia de leyes, que aumenta la probabilidad de transigir las normas, generando una escalada de imitación que conduce al caos, la delincuencia y el vandalismo, veamos algunos ejemplos:


Basura en la calle


Imagina que vas por la calle comiendo un paquete de papas y al terminar, debes deshacerte del empaque, ves a lo lejos una papelera y también miras al suelo, si ves que en el suelo hay basura, la probabilidad de que tires el paquete al suelo aumentará; pero si en el suelo no hay un solo resto de basura, la posibilidad de acercarte a la papelera es mayor.


Otra situación (ocurrió en muchos sectores de Bogotá) es cuando se dejan bolsas de basura fuera de los contenedores, al poco tiempo, se van acumulando más y más bolsas de basura, llegando a ocuparse con desperdicios no permitidos como escombros, colchones y muebles.


Los autos abandonados


El profesor Phillip Zimbardo, dirigió un experimento donde se dejaban dos autos abandonados, uno en un barrio situado en una zona pobre y conflictiva y el otro en una zona rica y tranquila.


El resultado inicial fue que el auto abandonado en la zona pobre, a las pocas horas ya presentaba considerables desperfectos mientras que el coche que estaba en la zona rica seguía intacto, se podría concluir que la pobreza fue la culpable, pero no fue así.


Después de una semana, los investigadores rompieron una de las ventanas del auto abandonado en el barrio rico y al poco tiempo, este automóvil estaba en similares condiciones que el del barrio pobre.


La conclusión fue: “...la causa no reside en la pobreza, sino en que el cristal roto en un coche abandonado transmite una idea de deterioro, desinterés y despreocupación, que va a crear un sentimiento de ausencia de ley, de normas y de reglas. El cristal roto crea la sensación de que todo vale. En esta situación, cada ataque que el coche sufre reafirma y multiplica esa idea hasta que el vandalismo se vuelve incontenible”.


El metro de Nueva York


En los 80´s, el metro de Nueva York, era el epicentro de la delincuencia en la ciudad, para entonces, las autoridades decidieron tomar como referencia la teoría de la ventanas rotas, e iniciaron labores exhaustivas de reparación y limpieza en las estaciones, quitaron la suciedad, borraron los grafitis, implementaron medidas “anticolados” y se controlaron los pequeños robos; así, lograron convertir las estaciones del metro en lugares seguros y las cifras de delincuencia en los sectores aledaños se redujeron considerablemente.


Gracias a los resultados en el metro, en toda la ciudad se impuso una política de “tolerancia cero”, persiguiendo todas las pequeñas transgresiones de la ley y las normas de convivencia, fomentando la limpieza y el orden en las comunidades, logrando así, un gran descenso del índice de criminalidad en la ciudad de Nueva York.


¿Por qué aplicar esta teoría en nuestra vida diaria?


Cuando desmeritamos la importancia del cumplimiento de las pequeñas normas, omitimos nuestros deberes o no imponemos las sanciones correspondientes, estamos “rompiendo el cristal” y desencadenando una serie de situaciones que posteriormente nos afectarán personalmente, sea en corto, mediano y largo plazo y si nadie lo repara, pronto los demás cristales (hijos, familiares, compañeros de trabajo y vecinos) seguirán el mismo camino.


Debemos ser  conscientes que nuestros actos individuales afectan a nuestro entorno y que la situación del entorno afecta nuestro bienestar individual en todos los ámbitos (familia, trabajo, estudio) y si somos referentes en nuestra familia, trabajo o comunidad, nuestro nivel de responsabilidad es mayor.


Por tanto, debemos procurar conocimiento y claridad de las normas que imponemos en casa o empresas y las que se deben cumplir en comunidad, impidiendo que la flexibilidad se convierta en laxitud, reparando los cristales con las sanciones y reparaciones correspondientes, aportando así, en la consecución de una sociedad más justa y con mayor bienestar.


Por Camilo Hernán Salamanca, @Salamac.


Basado en un artículo de Roberto Muelas Lobato, Psicólogo, Magíster en intervención social y Doctor en Psicología social.


Referencias: 


The broken windows theory, Alex Rovira, Link: https://www.alexrovira.com/en/soluciones/articulo/la-teoria-de-las-ventanas-rotas


NYPD - Historical and Current Research: Broken Windows, Ellen Belcher, Link: https://guides.lib.jjay.cuny.edu/nypd/brokenwindows